La palabra bondad en griego es la palabra “Agathosyne”, que significa bondad, expresa cualidad de hacer lo bueno, se define también como benevolencia, hacer el bien, hacer lo correcto, también podría entenderse cómo el ánimo  de ayudar.

Una persona bondadosa no solo ayuda a las personas  cercanas, sino está dispuesto a ayudar a una persona desconocida, porque su anhelo es brindar lo que tiene en su corazón, y es reflejar esa cualidad de hacer lo bueno, aún a veces exponiendo su propio bienestar.

La persona bondadosa no es egoísta.

•  También se dice que una persona bondadosa es una persona de genio apacible, la persona bondadosa se caracteriza por ser una persona que realiza el bien y procura lo bueno para las personas a su alrededor.
•  La bondad ayuda a poner en práctica la paciencia y la benevolencia hacia los demás, una persona bondadosa ayuda sin esperar nada a cambio, su satisfacción es sentir que sirve a alguien que lo necesita.
•  La diferencia de la bondad con la benignidad, es que la bondad es la parte práctica, el buen corazón y actitud de la benignidad.

Se considera también que “una persona tiene la cualidad de la bondad cuando siempre se mantiene dispuesta a ayudar a quien lo necesita, cuando se muestra compasiva con las personas que se encuentran sufriendo por distintas circunstancias y también cuando mantiene una actitud amable y generosa hacia los demás” https://losvalores.org/que-es-la-bondad/.

La Biblia nos habla de la bondad como uno de los frutos del Espíritu Santo, y el creyente del evangelio se debe caracterizar por ser bondadoso y compasivo. El Señor Jesús nos enseña que desde la niñez debemos ser bondadosos y compasivos.

“nos dice además que el fruto del Espíritu es en toda bondad, justicia y verdad.”(Efesios 5:9)

La bondad es una cualidad indispensable de los cristianos que caminan en el espíritu de Dios y son guiados por él.

“El amor sea sin fingimiento. Aborreced lo malo, seguid lo bueno”. (Rom. 12:9).

Se debe seguir y hacer lo bueno, y al hacerlo da como  resultado que también se debe aborrecer el mal, una persona no puede ser buena y mala al mismo tiempo, si en su corazón hay maldad, quiere decir, que no ha tenido un encuentro personal con Jesús, no tiene a Jesús en su corazón, porque de lo contrario, procuraría siempre hacer lo correcto, no por obligación, sino porque ha entendido que el hacer lo bueno, el ser bondadosa, es una actitud que a Dios le agrada.